1. Por la importancia de las habilidades socioemocionales para una adecuada inserción laboral

“Recientemente, el Foro Económico Mundial (FEM) ha señalado que promover innovaciones en el ámbito educativo que incluyan, por ejemplo, un énfasis en las habilidades de colaboración y la capacidad de resolución de problemas de NNA (niños, niñas y adolescentes) podría aumentar la productividad y la inserción laboral”, así lo afirma Eduardo Vallejos, jefe de Programas de la Fundación Impulso Docente. 

Eduardo agrega que tanto el FEM como Reimers y Chung (2017) “han planteado que dado el actual escenario de desigualdad educativa –agudizado por la crisis del COVID- 19– y el veloz cambio tecnológico, sumado a otras problemáticas presentes de consecuencias futuras (cuidado ambiental, enfermedades mentales como la depresión y ansiedad, entre otras), es imprescindible seguir innovando en términos educativos. 

En este contexto, la promoción del aprendizaje socioemocional y el desarrollo de las habilidades afines a aquello, desde un enfoque que integre lo cognitivo y lo emocional (Barret, 2018) en las escuelas, es fundamental para contribuir a un mayor nivel de bienestar y salud a nivel individual y social en el futuro de NNA y en su efectiva inserción laboral”.

“Ya no se percibe una dicotomía entre habilidades técnicas y socioemocionales, sino que se comprende que se refuerzan y necesitan mutuamente”. Juan Antonio Álvarez, director ejecutivo Fundación Trabün. 

2. Porque las habilidades socioemocionales son claves en el contexto laboral.

Juan Antonio Álvarez, director ejecutivo de la Fundación Trabün, la cual actualmente trabaja con 20 colegios de la RED Irarrázaval, afirma que “existen muchas investigaciones que refuerzan la necesidad de desarrollar habilidades relacionales para estar mejor preparados para el contexto laboral, como por ejemplo que 8 de las 10 habilidades más valoradas de los trabajadores del siglo XXI son habilidades socioemocionales (World Economic Forum)”.  

Al mismo tiempo, Juan Antonio agrega: “Si añadimos que la vinculación con el mundo del trabajo es un pilar fundamental en el contexto técnico profesional, con ambientes laborales cada vez más inciertos y un mundo dinámico, es vital que se desarrollen habilidades que permitan reinventarse, aprender por cuenta propia, persistir ante las dificultades y desenvolverse asertivamente en la relación con otros, entre otras habilidades socioemocionales”.

Eduardo Vallejos, por su parte, afirma: “Hoy más que nunca, el mundo productivo y la sociedad demandan personas íntegras, con criterio, al momento de tomar decisiones y los jóvenes que se insertarán en dicho contexto requerirán de una gran capacidad de adaptación y de innovación. En esa línea, el Aprendizaje Socioemocional (ASE) es crucial para darles satisfacción a las necesidades futuras que el mundo requerirá en el mediano plazo y contribuirá a una inserción laboral armónica y efectiva, tanto para los y las estudiantes en el corto plazo, como para sus futuros empleadores”.  

Actividades realizadas por la Fundación Trabün para desarrollar habilidades socioemocionales

3. Porque favorecen el bienestar de los estudiantes y de los docentes.  

Desde Fundación Trabün, Juan Antonio Álvarez señala: “Destaco especialmente el hecho de que los docentes le han tomado el gusto a desarrollar las habilidades socioemocionales de sus estudiantes, pues comprenden que son un complemento insustituible de las habilidades cognitivas y técnicas, además de favorecer su bienestar”.

Vallejos agrega que el aprendizaje socioemocional también beneficia el bienestar de los docentes: “En Impulso Docente hemos tenido excelentes experiencias trabajando el Aprendizaje Socioemocional con colegios TP. Hemos tenido el privilegio de coincidir con directores y equipos de liderazgo que han entendido, desde la experiencia, que integrarlo en sus escuelas es imperativo, no solo para el desarrollo integral de sus estudiantes, sino también para el bienestar de sus docentes. Esa convicción y claridad ha generado una apertura y un compromiso clave al momento de tomar decisiones que favorezcan este trabajo”.

“El mundo productivo y la sociedad demandan personas íntegras, y los jóvenes que se insertarán en dicho contexto requerirán de una gran capacidad de adaptación y de innovación”. Eduardo Vallejos, jefe de programas de la Fundación Impulso Docente. 

4. Porque la emoción y la cognición nunca debiesen haberse separado. 

“Desde nuestra ventana, es posible afirmar que la crisis sanitaria y sus consecuencias nos han empujado a poner el foco en el desarrollo socioemocional, no solo de los estudiantes, sino también de los adultos que se desarrollan sistemática y continuamente en la escuela”, afirma Eduardo Vallejos y ante esto añade: “Tenemos por delante una oportunidad de innovar y de educar como siempre hemos soñado, atando el corazón y la mente, las emociones y la cognición, que, tal como lo ha demostrado la neurociencia, nunca debieron estar separados. La invitación es a mirar con esperanza el futuro y con deseos genuinos de seguir buscando soluciones colectivas a los grandes desafíos que enfrentaremos en el futuro, pues juntos llegamos más lejos”. Juan Antonio concluye: “Ya no se percibe una dicotomía entre habilidades técnicas y socioemocionales, sino que se comprende que se refuerzan y necesitan mutuamente”.