Encuenta el contenido que necesitas

Ingresa a tu cuenta grupoeducar

Abr 2024 - Edición 281

Por qué sí a las evaluaciones en EMTP

Suscríbete a nuestra revista y podrás leer el contenido exclusivo online

Regístrate y accede a la revista

3 pasos para ser asertivos y no agresivos

Saber distinguir y manejar las emociones es parte importante del desarrollo de la resiliencia en niños, jóvenes y adultos. Conversamos con la psicóloga española Silvia Álava, quien nos cuenta que, para superar y reponerse de los momentos más difíciles, primero hay que entender qué es lo que sentimos y cómo lo gestionamos para que se traduzca en un aprendizaje.

Por: Ximena Greene
3 pasos para ser asertivos y no agresivos

Como un “terremoto emocional”. Así define la psicóloga clínica española Silvia Álava las consecuencias físicas, psicológicas y emocionales que ha dejado la pandemia estos dos últimos años. Y es que, de acuerdo con un estudio publicado en España, los niños están más tristes, más enojados, han empeorado su capacidad de relacionarse con otros y han disminuido su talento para controlar sus propias emociones.

La situación en Chile no es muy diferente. Una investigación sobre impacto de la crisis sanitaria en la salud mental de jóvenes (19 a 24 años) y adolescentes (14 a 18 años) chilenos, elaborado por la Fundación Relaciones Inteligentes y el equipo de Educación Emocional en la Infancia y Adolescencia de la Universitat de València, concluyó que el 80% de los encuestados se encontraban preocupados por su estado psicológico (ansiedad, insomnio, irritabilidad y tristeza) durante el confinamiento. 

Frente a este escenario, Silvia señala que el papel de los padres y los profesores es fundamental. “En el caso de los niños, y también los adolescentes por su propio desarrollo evolutivo, a nivel madurativo-emocional, no son capaces de regular bien lo que están sintiendo y necesitan de un padre, una madre, sus profesores o un adulto de referencia que los guíe de cerca para identificar qué están sintiendo, por qué lo están sintiendo y qué hacer con ello”, explica.

Sin embargo, advierte que hoy, debido a la vulnerabilidad e incertidumbre social, a veces ni siquiera los adultos son capaces de identificar qué les pasa a ellos. “He visto a padres tan sobrepasados en su propia vida, que no son capaces de gestionarse a ellos mismos, menos aún a sus hijos e hijas”, cuenta. Y agrega, “ante esta no-gestión, no solo no los están ayudando, sino que además les están dando un ejemplo muy tremendo de cara a resolver los conflictos de forma agresiva en vez de asertiva”.

Estrategias para guiar a padres y profesores

A continuación, la psicóloga nos entrega tres pasos o consejos que los adultos pueden seguir para poder acompañar a sus hijos o alumnos en la gestión de sus emociones y el desarrollo de la resiliencia.

1. Autoobservación

“Lo primero que tienen que hacer, antes de poner el foco en sus hijos o alumnos, es dar vuelta el espejo y mirarse”, señala Silvia. “Observen cómo están, qué sienten o cómo están reaccionando ante las diferentes situaciones que están pasando en sus casas o en las aulas, y a partir de ahí decidan si están en un buen momento para ayudar a regular a sus hijos o estudiantes”.

La autoobservación es muy importante porque los niños aprenden a través del modelado, es decir, copian lo que hacen los adultos de referencia, y es muy difícil que puedan ser resilientes y que puedan aprender y crecer frente a la adversidad o que puedan relacionarse de manera asertiva, diciendo qué es lo que les pasa, lo que sienten o lo que quieren, si los padres  o profesores hacen todo lo contrario, nos explica la profesional.

2.  Ventilar y validar las emociones

De acuerdo con Álava, otra de las cosas que se repite mucho en su consulta por estos días, especialmente tras dos años de encierro, es el estrés postraumático. “Veo a muchos niños y jóvenes que no tienen las estrategias adecuadas para asimilar eventos que han sido emocionalmente desafiantes, y parte de ello se explica porque no saben qué están sintiendo. No son capaces de nombrar la emoción”, comenta.

Para evitar que esto ocurra, o para que sea menos probable que ocurra, la experta señala que es fundamental ventilar las emociones, animarlos a que puedan definir qué están sintiendo, qué les está ocurriendo, qué es lo que notan a nivel físico, y que les pongan un nombre a esas emociones. 

Sin embargo, la entrevistada también advierte que este ejercicio tiene que estar acompañado de una completa validación de todas las emociones. “Nuestra tendencia como adultos es a invalidar las emociones de los niños. ‘No llores’. ‘No te enojes’. ‘No pasa nada’, son frases que repetimos a diario. Pero si hacemos esto, nunca van a aprender a gestionar lo que les pasa y nunca van a acudir a nosotros por ayuda, y esto no solo es contraproducente, sino también perjudicial para su salud”, comenta.

3.  El error como fuente de aprendizaje

“No hay que demonizar el error”, señala Silvia. “Todo lo contrario, los padres y los profesores deben ser capaces de instalar la idea de que equivocarse es algo sano, normal y una constante fuente de aprendizaje”. Según la experta, el ensayo y error, los traspiés e incluso los malentendidos deben ser una parte importante de la conversación cuando hablamos de resiliencia. “La resiliencia es un proceso y una capacidad que se desarrolla a partir del error. No podemos ayudar a nuestros hijos o alumnos a crecer ante la adversidad y generar recursos a partir de la experiencia si penalizamos y castigamos el error”, comenta.

¿Quién es?

Silvia Álava es doctora y licenciada en Psicología por la Universidad Autónoma de Madrid, especialista en Psicología General Sanitaria y en Psicología Educativa y acreditada por el Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid como psicóloga educativa. Es autora de cinco libros, entre los que destacan El arte de educar jugando, Queremos que crezcan felices y Queremos hijos felices. 

Deja un comentario

Mantengamos la conversación, búscanos en twitter como @grupoEducar

Ingresa a nuestra comunidad en Facebook y profundicemos el debate.

Créate una cuenta en grupoeducar

Revisa nuestro contenido en todas las plataformas desde un teléfono hasta nuestra revista en papel.