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Abr 2024 - Edición 281

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Volver a estudiar es posible

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Camilo de la Fuente volvió al colegio a sus 27 años luego de ver un afiche de CreceChile en la Municipalidad de Colina. Hoy está feliz y se prepara para entrar a la universidad, luego de obtener 700 puntos en la PSU. 

Según la Encuesta Casen 2013, en nuestro país existen más de 5 millones de adultos que no han terminado el colegio. La ONG CreceChile visualizó esta problemática y trabaja día a día para disminuir esta cifra, a través de un programa de nivelación de estudios. 

Gracias a la ayuda de 150 voluntarios que dedican una tarde a la semana para enseñar materias del colegio, adultos se preparan durante todo el año para rendir los exámenes del MINEDUC y así poder finalizar una etapa que no pudieron terminar cuando jóvenes.

Actualmente CreceChile cuenta con cinco sedes en la Región Metropolitana; Pudahuel, Colina, Maipú, Quilicura y La Florida y más de 3.500 personas han pasado por esta experiencia. Anualmente alrededor de 500 alumnos nivelan sus estudios mediante esta ONG.

Camilo de la Fuente, más conocido como el “Coca Cola”, llegó a CreceChile el año 2015 luego de ver un afiche de la campaña de estudiantes en la Municipalidad de Colina.  Él quería terminar el colegio para cumplir el sueño que tenía su padre. A los 16 años se vio en la obligación de dejar sus estudios, pues tenía 11 hermanos y tuvo que empezar a trabajar para poder ayudar económicamente en su hogar. 

Actualmente Camilo vive con su señora y sus dos hijos, Máximo y Vicente.  Su familia siempre lo apoyó en la decisión de retomar sus estudios, pues sabían que podía ser muy positivo para él.

Camilo vivió una experiencia muy enriquecedora. Lo que más le gustó de CreceChile fue el ambiente y los profesores, además de sentir un gran cariño por sus compañeros. Sin embargo, no fue fácil retomar los libros y cuadernos después de 11 años. “Muchas veces bajé los brazos porque era muy difícil. Un día estaba tan cerrado, triste que salí de la sala y dije no vuelvo más” confiesa Camilo. Sin embargo los profesores y coordinadores lo apoyaron en todo momento para que no se rindiera y así fue. Luego de un tiempo comenzó a mejorar sus resultados y se atrevió a rendir la PSU.

Grande fue la sorpresa cuando llegaron sus resultados y se enteró de que había obtenido más de 700 puntos.  ¡Un claro ejemplo de que se puede!  “Todavía no me la creo” confiesa Camilo. Ahora está feliz con sus resultados y listo para comenzar a estudiar Ingeniería en Prevención de Riesgos en la Universidad Andrés Bello.

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